Este es el monasterio más antiguo de Galicia: una joya histórica excavada en la roca

Galicia, hogar de paisajes de ensueño decorados por frondosos bosques, grandes montañas e imponentes acantilados que vigilan las preciosas playas del Atlántico. Pero entre esos árboles y montes se esconden misterios y antiguas construcciones que alimentan las leyendas de las ‘meigas’.
El territorio gallego cuenta con un sinfín de templos religiosos que, en algún momento de la historia de la comunidad, fueron un pilar fundamental de la cultura. A día de hoy algunos de ellos no son más que ruinas, pero a pesar de ello, es posible pasear por su interior para conocer el pasado de Galicia y sus habitantes.
Historia del monasterio de San Pedro de Rocas
Viajamos hasta Esgos, un pequeño pueblo de poco más de mil habitantes ubicado en la provincia de Ourense. Los encantos de este municipio no radican únicamente en su precioso paraje natural, sino que es el hogar al monasterio de San Pedro de Rocas, un templo histórico único.
Lo más impresionante de este monasterio es su construcción, ya que está excavado directamente en roca, sin cuidadas estructuras góticas ni perfecciones renacentistas, simplemente grandes paredes de piedra que sobreviven al paso del tiempo como si fueran indestructibles.
La historia de San Pedro de Rocas se remonta al año 573, cuando se datan los primeros asentamientos de ermitas en la zona y tal y como lo indica en una lápida que a día de hoy puede verse en el Museo Arqueológico Provincial. Así, es el cenobio más antiguo de Galicia. Según los estudios, sus creadores fueron siete hombres que decidieron crear allí un espacio en el que dedicar su vida al retiro y la oración.
Tiempo después, aproximadamente en el siglo IX, un caballero conocido como Gemodus, encontró el monasterio mientras cazaba y decidió quedarse allí. Sus compañeros lo nombraron abad y, aunque no se sabe a ciencia cierta si es leyenda o realidad, Alfonso V recibió San Pedro de Rocas de la mano de este misterioso hombre en el 1007. Fue declarado Monumento Histórico-Artístico en 1923.
La iglesia del monasterio
La iglesia de este monasterio data del siglo VI y consta de tres naves excavadas en la roca. Su techo cuenta con una pequeña abertura en la parte superior que permite entrar a la luz e iluminar la sala. Se dice que en la pared de la capilla izquierda se encontraba el sepulcro de Gemodus. También se encontró un fresco cuyo origen se data entre el 1175 y 1200.
El recinto del templo se amplió con una nueva nave y en el siglo XV se añadió un campanario en lo más alto de esta formación rocosa de casi veinte metros de altura. En uno de los edificios del monasterio se encuentra el Centro de Interpretación de la Ribeira Sacra y puede visitarse durante su horario de apertura que debes consultar en su página web.