Desde Uncastillo hasta los Monegros: ruta en autocaravana por Zaragoza por los paisaje más impresionantes
Cada vez más viajeros eligen una opción diferente a la habitual para hacer turismo: recorrer la carretera con una autocaravana y descubrir increíbles lugares por el camino. La provincia de Zaragoza es un destino perfecto para ello, un lugar lleno de pueblos con mucha historia detrás y preciosos espacios naturales donde desconectar y respirar aire puro.
Uncastillo
Empezamos la ruta por la villa de Uncastillo y su abundante patrimonio histórico y artístico, que refleja la importancia que tuvo en el pasado. De esta manera, podremos visitar los restos del castillo que se alza en lo más alto del pueblo, varias iglesias románicas como San Martín o Santa María y su laberíntica judería. Uncastillo cuenta con un área para autocaravanas donde podremos pasar la noche sin coste.
Sos del Rey Católico
Este pueblo medieval tiene bonitos monumentos que conocer como la Casa de la Villa, que data del siglo XVI, o su castillo, una fortificación defensiva que en un principio estuvo construida en madera. De ámbito religioso, también merecen una visita la Iglesia de San Esteban con sus detalladas pinturas interiores y el Monasterio de Valentuñana, construido en el siglo XVII. El pueblo también cuenta con un área de autocaravanas para pernoctar junto al polideportivo.
Parque Natural del Moncayo
Dejamos atrás los núcleos de población y nos adentramos en el Parque Natural de Moncayo. En sus 11.000 hectáreas nos topamos con una riqueza vegetal excepcional y una gran variedad de ambientes, desde frondosos bosques hasta zonas extremadamente secas. Además, podremos observar animales salvajes como jabalíes, corzos, águilas reales y otras aves rapaces. Podremos aparcar la caravana y pernoctar en la comarca de Purujosa, a los pies del parque.
Los Monegros
Terminamos la ruta en un paisaje totalmente diferente: los Monegros. Se trata de un ambiente de carácter desértico de gran belleza que ha sido clasificado como paisaje singularísimo único en Europa. Su aridez se debe a las bajas precipitaciones, el viento y la erosión. En la Cartuja de los Monegros podremos aparcar la autocaravana y pasar la noche.
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