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Una nueva estación subterránea conectará la alta velocidad entre Atocha y Chamartín

El Consejo de Ministros ha aprobado este martes la licitación de la construcción de la estación pasante de Madrid-Puerta de Atocha Almudena Grandes que, con una inversión de 500 millones, permitirá conectar toda la alta velocidad con el túnel de la estación Chamartín-Clara Campoamor.

Así lo ha anunciado la ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, durante la rueda de prensa posterior a la celebración del Consejo de Ministros de este martes. Esta estación subterránea dispondrá de cuatro nuevas vías y dos andenes y se ubicará bajo la actual estación de alta velocidad y la calle Méndez Álvaro.

Así, esta futura estación, junto al nuevo acceso sur de Chamartín, que entró en servicio el pasado mes de julio, permitirá que la alta velocidad pueda efectuar parada en ambas terminales haciendo que Madrid cuente con una gran estación central con dos paradas icónicas: Atocha y Chamartín.

Esta ampliación «permitirá la conexión total de la mitad norte y la mitad sur de la red de alta velocidad de España, así como que los trenes de Levante hagan parada en Atocha», ha señalado el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) en un comunicado, done ha añadido que de esta forma se incrementará la capacidad y operatividad de este punto neurálgico de la red de alta velocidad del país.

Características

La infraestructura –de gran complejidad técnica, pero que se construirá manteniendo la circulación ferroviaria– discurrirá de norte a sur a lo largo de la calle Méndez Álvaro, donde el Mitma ha explicado que se aprovechará el desnivel para generar varias cotas en las que desarrollar distintos espacios; conectando tanto con Puerta de Atocha en el norte como con un nuevo vestíbulo en Méndez Álvaro por el extremo sur.

Esta nueva estación, ubicada en la Fase 2 del nuevo complejo ferroviario de Atocha, estará integrada con las demás instalaciones de alta velocidad (utilizando los mismos vestíbulos, filtros de control, etc.) con el que se pretende alcanzar el máximo aprovechamiento y así «evitar la duplicidad de espacios y equipamientos».

Aunque la terminal es subterránea, esta contará con una gran abertura central, que dejará pasar la luz a través de un lucernario y un gran muro cortina en la fachada de Méndez Álvaro. «Además, facilitará la comunicación visual del espacio soterrado con los elementos superiores», han detallado.

En cuanto al nuevo vestíbulo mixto de Méndez Álvaro, incorporará el lado oeste de la terminal –que contará con una nueva fachada– a los servicios de alta velocidad. «El mayor dinamismo de esta zona propiciará un mayor equilibrio viario y contribuirá a la reducción del tráfico rodado en la Avenida Ciudad de Barcelona, así como en los Paseos Infanta Isabel y Reina Cristina y la Calle Alfonso XII», ha manifestado el Mitma.

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