Un bebé de 400 gramos sobrevive gracias a que los médicos lo envolvieron en una bolsa de plástico
Los profesionales del Worcestershire Royal Hospital de Worcester (Reino Unido) han logrado un hito al salvar la vida de un bebé que nació prematuramente, tras tan sólo 25 semanas de embarazo (apenas seis meses), y con un peso de únicamente 400 gramos. Para ello, tuvieron que meterlo en una bolsa de plástico que lo mantuviera caliente.
Un bebé en una bolsa
Tal y como explica el medio británico Echo, el bebé (llamado Pace), nacido el 11 de marzo, no tenía aún correctamente desarrollados los pulmones, por lo que fue necesario practicarle una maniobra de 5 minutos para que comenzara a respirar. Tras ello, a parte de ser introducido en la bolsa neonatal (un dispositivo similar a una bolsa de plástico con una goma ajustable que se usa para mantener la temperatura corporal y para proteger su piel, tan delicada que no se le podía tocar) se le tuvo que colocar un ventilador para mantener su respiración y ha pasado sus primeras semanas en una UCI (Unidad de Cuidados Intensivos).
Actualmente, Pace se encuentra en el hospital de Bristol (de hecho, los progenitores han abierto una campaña en GoFundMe para recaudar el coste de los viajes hasta ese centro), sujeto a otro dispositivo de asistencia respiratoria y luchando contra una sepsis pero, afortunadamente, evoluciona de manera favorable.
Incluso, sus padres ya han tenido la oportunidad de sostenerlo en sus brazos, algo que en un primer momento no era posible debido a su fragilidad. Eso sí, todavía le queda un tiempo de hospitalización: hay que tener en cuenta que los pulmones no se desarrollan enteramente hasta la semana 32 (es decir, unos dos meses después del parto en el particular caso de Pace) y que los bebés con tan bajo peso tienen mayores riesgos de sufrir determinadas patologías, por lo que es preciso que su estado sea objeto de una estrecha vigilancia.
¿Qué es una bolsa neonatal?
El dispositivo en cuestión que se empleo para que el pequeño Pace pudiera mantener una temperatura estable se conoce como bolsa neonatal, y consiste más o menos en lo que podríamos imaginar por su nombre: en una bolsa de plástico.
Concretamente, es una bolsa de polietileno con un cordón ajustable en su extremo, con la que se envuelve al los bebés de menos de 1.500 gramos que necesitan estabilización térmica. El polietileno es un material altamente aislante, con lo que, evitando en lo posible abrir la bolsa, logra evitar que el bebé pierda temperatura.
Hay que tener en cuenta que el enfriamiento de los bebés tiene serias consecuencias. Por cada grado por debajo de los 36,5 grados centígrados, la mortalidad se incrementa en un 28%, y el riesgo de sepsis tardía en un 11%; la hipotermia puede provocar complicaciones graves como hipoxia, acidosis metabólica, aumento de la dificultad respiratoria o hipoglucemia.