Seis pueblos espectaculares para visitar con niños
MIRAVET (Tarragona)
Existe un único lugar en España donde es posible cruzar el río Ebro en un transbordador fluvial sin motor. ¡Es el último que queda! Formado por dos llaguts, unidos por una plataforma, funciona impulsado solo por la fuerza del agua. Subirnos a él es una de las cosas que podremos hacer si nos acercamos hasta esta localidad coronada por una fortaleza templaria del siglo XII, de la que podemos visitar las murallas, las caballerizas, el refectorio… Muy cerca nos esperan Les Coves Meravelles de Benifallet, que nos transportarán a un mundo fantástico. Imprescindible: los pastissets, dulces de origen árabe. turismemiravet.cat
ALLARIZ (Ourense)
A los mayores les gustarán los outlets que abren sus puertas en su coqueto casco histórico, con calles empedradas, casi todo peatonal. A los pequeños, todo lo demás: desde sus amplios jardines junto al río Arnoia, donde se alza el Molino do Burato, hasta alguno de sus curiosos museos, como el de la Moda o el del Juguete, con más de 600 piezas históricas, donde los niños descubrirán cómo y con qué jugaban sus padres y abuelos. A las afueras aguarda el Ecoespacio do Rexo, con árboles, piedras y otros elementos intervenidos por Agustín Ibarrola. ¡Puro color! Tiene un rebaño de ovejas y quesería propia. allariz.gal
CABEZÓN DE LA SAL (Cantabria)
No hace fatal viajar a Estados Unidos para adentrarse en un bosque de secuoyas. Las de este sorprendente paraje de Cantabria, al que se accede a través de una senda, con escaleras y puentes, fueron plantadas en los años 40. En total hay 848 ejemplares, que miden más de 35 metros de altura. Es fácil encontrarlo. Pertenece a Cabezón de la Sal, en la comarca Saja-Nansa, con varios museos muy interesantes, como el de la Naturaleza, el del Arte Textil y el del Calabozo, en una torre del siglo XV. Las cabañas del Poblado Cántabro nos permitirán imaginar cómo se vivía allá por la Edad de Bronce y de Hierro. turismocabezondelasal.com
SANTA PAU (Girona)
En pleno Parque Natural de la Zona Volcánica de La Garrotxa, entre las sierras de Sant Julià del Mont y Santa Maria de Finestres, emerge la villa medieval de Santa Pau, que, con su castillo y su plaza Mayor, la Firal dels Bous, parece como salida de un cuento. Podremos convertirnos en personajes de leyenda subidos en alguno de los carruajes que recorren la Fageda d’en Jordà, cuyas hayas crecen a 500 metros de altura sobre la colada de lava del volcán del Croscat. ¡Hay que visitarlo! También el de Santa Margarida: su cráter hoy es un prado. visitsantapau.com
URUEÑA (Valladolid)
Desde algunos de sus rincones se contempla las mejores panorámicas sobre la Tierra de Campos, a cuya orilla nos encontramos. Su castillo, del siglo XI, fue habitado por personajes tan influyentes como Doña Urraca, que da nombre al torreón, el punto más elevado del conjunto monumental que forman la fortaleza y las murallas de Urueña, con un precioso casco histórico repleto de librerías. Pongamos música de fondo… Bastará con que nos acerquemos hasta el museo que acoge la colección de Luis Delgado, con más de 500 instrumentos. Otro museo que nos sorprenderá es el del Cuento, con ediciones victorianas de finales del siglo XIX. urueña.es
EL PROVENCIO (Cuenca)
Situado al suroeste de la provincia de Cuenca, este pueblo con poco más de dos mil habitantes es una sorpresa continua. Para muchos es un gran desconocido, pero hay quienes lo sitúan en el mapa desde hace tiempo gracias a la Feria del Cómic que acoge cada verano. De este encuentro anual surgió el Museo del Cómic, con ejemplares de clásicos como El Guerrero del Antifaz, TBO, Conan… Hay que visitarlo y animarse a seguir después la Ruta de Arte Urbano, con 18 murales pintados por artistas de toda España repartidos entre casas y calles. El Museo Paleolítico y las cuevas que conforman El Provencio subterráneo completan su oferta. elprovencio.com