¿Se puede bañar al bebé si el cordón umbilical aún no se ha caído?

El aseo del recién nacido es importante, pero existen algunas dudas sobre si es posible bañarlo aún cuando el cordón umbilical no se le ha caído. La Asociación Española de Pediatría (AEPED) lo deja claro: «se puede sumergir al niño, incluso aunque no se le haya caído el cordón umbilical». Pero ¿por qué existen personas que afirman que no? Quizás se deba a la delicadeza de sus cuidados.
¿Por qué es importante el cordón umbilical?
El cordón umbilical une al bebé con la madre mientras se encuentra en el útero. Gracias a este cordón el bebé puede alimentarse, pero también le llega el oxígeno por medio de esta vía. Al nacer, el cordón umbilical se corta y suele caerse en las próximas semanas de manera natural. No obstante, hasta que esto suceda, hay que hacer una serie de curas y mantener la zona muy limpia.
Precauciones al tocar el cordón umbilical
Lavarse muy bien las manos antes de tocar el cordón umbilical y limpiar la zona con agua y un jabón neutro es fundamental para mantenerla limpia y libre de cualquier gérmen. Esto debe hacerse todos los días y se puede aprovechar el momento del baño, en el caso de que este sea diario (una decisión que tomarán los progenitores) para hacer este ritual de limpieza del cordón umbilical.
No hay nada de malo en sumergir al bebé en la bañera, en asearlo con normalidad. Pero, quizás haya progenitores que sean algo reticentes a hacerlo por los restos de humedad que pueden quedar en el cordón umbilical y que si no se secan bien pueden dar lugar a infecciones. El truco, como explica la AEPED, está en usar una gasa alrededor del cordón para mantenerlo siempre seco.
Hay que cambiar el pañal cuando toque
Cuando un bebé orina en el pañal puede que si no se le cambia el cordón umbilical pueda verse afectado. La orina puede mojar el cordón y humedecerlo, algo que convendría solucionar rápido, lavando la zona con agua y jabón, secándola muy bien y colocando una gasa limpia. Hay que extremar las precauciones con el cordón umbilical en todo momento.
Señales de alarma en el cordón umbilical
A pesar de todas las precauciones, el cordón umbilical puede infectarse igualmente. Se trata de una herida que puede comenzar a expulsar una secreción amarillenta que nos tiene que hacer desconfiar de una infección. A veces, también la zona puede estar más enrojecida de lo habitual o, como indica la AEPED, producirse un sangrado, aunque este puede deberse a un roce.
También, debería ser una señal de alarma el hecho de que pasados 15 días el cordón umbilical no se desprenda. Esto no es normal. El cordón, que tendrá una especie de pinza, debe caer durante la primera semana o antes de que se cumplan quince días. SI esto no es así, conviene acudir al pediatra para que pueda comprobar qué es lo que está ocurriendo.
Es raro que el cordón umbilical dé problemas si se siguen las recomendaciones médicas. No obstante, es importante prestar atención a cualquier posible cambio en él. A pesar de todo esto, recordamos que no hay ninguna contraindicación para bañar al bebé cuando el cordón umbilical todavía no se le ha caído y que hay que cerciorarse muy bien de que la zona está siempre seca y limpia.