Ricos contra pobres en Qatar
La relación de la economía con el éxito en el fútbol no sigue una pauta lógica. La muestra está en que economía no acaba de casar totalmente con el éxito deportivo. De esta forma, Brasil es la más laureada con cinco títulos mundiales; sin embargo, su valor de plantilla (1.140 millones de euros) es el segundo mientras que por PIB (Producto Interior Bruto) per cápita está en la horquilla baja de la cita mundialista. Inglaterra es la más destacada en cuanto a valor de su plantilla (1.260 millones) y a PIB per cápita (63.123 millones), pero solo atesora una Copa del Mundo en sus vitrinas.
Las competiciones más importantes de cinco países de Europa (Inglaterra, España, Alemania, Italia y Francia) aportan 399 futbolistas a la cita mundialista. La Premier League es la competición de clubes que más jugadores lleva: 125. Le siguen LaLiga, con 80, Bundesliga, 75, Serie A, 66, y la Ligue 1, 53. Se da la circunstancia de que, si desglosamos por clubes, 16 aportan diez o más jugadores a Qatar 2022. Catorce europeos (Bayern, Manchester City, Barcelona, Manchester United, Real Madrid, PSG, Chelsea, Tottenham, Borussia Dortmund, Atlético, Juventus, Ajax, Arsenal y Sevilla) y solo dos de fuera del viejo continente: el Al Sadd qatarí y el Al Hilal de Arabia Saudí. Ambos clubes ceden la mayoría de los futbolistas de su selección nacional.
Dicen que el deporte, en este caso el fútbol, puede igualar a todos. Aunque los datos desde 1970, no acaban de demostrarlo. Los duelos entre selecciones de países considerados ricos y las de los menos favorecidos, en la Copa del Mundo, arrojan un balance favorable a los que más tienen. Así de los 684, 301 (44%) los han ganado los llamados ricos, por los 238 (35%) en los que se ha impuesto el equipo con menos recursos. El 21% de los encuentros (145) terminaron en empate. El Mundial de Argentina 78 fue en el que más se igualaron. Los ricos ganaron 39 encuentros y los pobres ganaron 37.
Túnez es la selección que posiblemente sea la más humilde de todas las que se darán cita en Qatar, si atendemos a todos los parámetros. Respecto a la renta per cápita, es la cuarta más baja y el valor de sus jugadores la sitúa como el quinto equipo con menor valor de su plantilla. Solo el ranking FIFA le da un respiro a la selección tunecina. Es la vigesimocuarta según esta clasificación. En el otro extremo está Países Bajos. La selección centroeuropea es séptima en renta per cápita y octava el ranking FIFA, mientras que su plantilla el noveno valor de las que se citan en Qatar.
Brasil, Argentina y Uruguay tienen en común una baja renta per cápita pero un alto valor de mercado de la plantilla, así como un elevado ranking FIFA y varios Mundiales a sus espaldas. Los brasileños sufrieron la peor derrota de su historia futbolística durante el partido de semifinales de 2014, donde los germanos les vencieron dejando el marcador 1-7. En lo que fue llamado el Mineirazo, haciendo referencia a otra histórica derrota de los brasileiros conocida como el Maracanazo donde siendo anfitriones, perdieron la final contra Uruguay frente a todo pronóstico.
A lo largo de la historia de los Mundiales hay tres partidos que representan el ‘Robin Hood’ futbolístico: Suecia-Senegal y Francia-Senegal, ambos del Mundial-2002, y Ghana-Estados Unidos (2006). En la cita mundialista de Corea y Japón 2002, Senegal ganó a dos selecciones que eran exageradamente más potentes económicamente: Suecia (57,7 veces más rico que el país africano) y Francia (47,7), En el caso de Ghana se impuso a Estados Unidos. El país norteamericano era en 2006 50, 4 veces más rico que Ghana.