Salud

«Puedes identificar a un paciente inconsciente por su actividad cardíaca»: la nueva tecnología biométrica para salvar vidas

La biometría es una de las grandes tecnologías emergentes en la actualidad, con aplicaciones tan cotidianas como desbloquear nuestros teléfonos móviles o usar el control por voz de diferentes dispositivos domóticos.

Son muchos los rasgos biológicos que nos hacen únicos y que, con los sistemas adecuados, pueden ser empleados para identificarnos inequívocamente. Por supuesto, los más conocidos son la huella dactilar, los rasgos faciales o las características vocales… Pero hay uno concreto que podría ofrecer ciertas ventajas sobre los demás: el latido de nuestro corazón.

«Todos tenemos un corazón latiendo»

Así lo explicó la doctora Caterina Fuster-Barceló en la defensa de su tesis Un estudio en profundidad de ELEKTRA como sistema biométrico, que tuvo lugar este martes en la Universidad Carlos III de Madrid. En el acto, al que asistió 20minutos, detalló el funcionamiento de este método identificativo basado en el procesamiento del electrocardiograma del usuario mediante herramientas de Inteligencia Artificial.

«Todos tenemos un corazón latiendo», señaló la autora. «Por eso ELEKTRA es un sistema inclusivo: no necesita que el usuario esté consciente, y no tiene el problema de otros sistemas como la identificación por huella dactilar en el que hay personas que no pueden emplearlo». Este principio es clave para algunas de las posibles aplicaciones del sistema, como la identificación de pacientes al ingresar en unidades de Urgencias o internados en residencias, para los que sea necesario controlar la medicación que reciben de forma habitual.

«Actualmente, existen una serie de errores importantes en la identificación de pacientes», concretó. «Por ejemplo, pacientes inconscientes o que padecen demencia que se quitan o a los que se les caen las pulseras identificativas. Según las estadísticas que tenemos, se dan casos en los que se les administra la medicación que no toca, y eso puede incluso ser mortal».

«Otro supuesto son las personas que ingresan en Urgencias en estado inconsciente. Como médico, tu no sabes quién es esta persona, no sabes si tiene alergias o si tiene otras condiciones; no lleva ningún método de identificación encima. Son casos reales que están dándose hoy en día».

«Usando por ejemplo la huella dactilar, tienes que disponer de un sistema dedicado», prosigue. «En cambio, en un hospital ya tienes todo el sistema montado para recoger el electrocardiograma, y seguramente tienes un ordenador. Sólo tendríamos que implementar la herramienta ELEKTRA para hacer esta identificación de usuarios».

Del diagnóstico a la identificación

ELEKTRA, como también se desgrana en el artículo al respecto (publicado en el medio académico Neurocomputing) es una herramienta de identificación biométrica basada en el procesamiento de imágenes de electrocardiograma.

El electrocardiograma es una representación gráfica de la actividad eléctrica del corazón, y es en la actualidad una técnica básica en el diagnóstico de patologías cardiovasculares. De hecho, ya existen iniciativas basadas en el procesamiento informático y a través de herramientas de Inteligencia Artificial con este fin. Sin embargo, esta es la primera vez que se propone su uso como parámetro identificativo.

En esencia, el sistema toma cada imagen que se le introduce, divide los latidos registrados en ella en una serie de intervalos regulares y a partir de ello elabora un mapa de calor único y exclusivo de esa imagen. Posteriormente, se genera una agrupación de varios mapas de calor que se corresponden con un único usuario.

La herramienta, así, se entrena con bases de datos de estas agrupaciones, a partir de las cuales aprende a extraer los rasgos únicos y característicos de este usuario. Una vez llevado a cabo este proceso, es capaz de realizar una identificación del usuario a través de una nueva imagen que se toma en tiempo real.

«Podría bloquearse si se intenta acceder bajo coerción»

Hay que tener en cuenta que nuestra actividad eléctrica cardíaca no es siempre constante e idéntica, sino que puede sufrir variaciones en función de parámetros como la actividad física que estemos realizando en cada momento (no es la misma si estamos corriendo o si estamos sentados y relajados), si se desarrollan con el tiempo patologías cardiovasculares o incluso en función del estado de ánimo.

Esto, no obstante, no elimina las ‘huellas’ características de cada persona, con lo que el sistema no necesariamente pierde la capacidad de identificar a una persona concreta aunque su ritmo cardíaco esté acelerado o, incluso, aunque esté sufriendo episodios como arritmias o fibrilación atrial.

De hecho, apuntó Fuster, «empleado como sistema de seguridad, permite al sistema identificar si el usuario está alterado en ese momento». De este modo, «podría bloquearse si está intentando acceder (a aquello que está protegido por la identificación biométrica) bajo coerción».

«Sería necesario unificar el sistema sanitario español»

La herramienta es prometedora, aunque hay que apuntar que aún quedan algunos obstáculos antes de que se pueda implementar en sus distintos ámbitos (ya sean administrativos, de seguridad o sanitarios).

Por ejemplo, y tal y como expresó la investigadora, la falta actual de bases de datos disponibles que recojan la evolución del electrocardiograma de una persona a lo largo de periodos largos de tiempo dificulta conocer cómo responderá la herramienta a los cambios que puedan darse en un usuario a largo plazo.

Por otra parte, en lo concerniente más concretamente a implementar ELEKTRA en el ámbito sanitario en nuestro país, Fuster opinó que «son necesarias propuestas como unificar el sistema sanitario español, para que un paciente pueda entrar en cualquier hospital y los profesionales sepan exactamente quién es».

Sea como sea, esta tecnología supone un paso más en el avance de la biometría como medio identificativo cada vez más presente en nuestro día a día y en los sistemas sanitarios, en los que cada día permite salvar más vidas. Y, de un modo ciertamente poético, ilustra todas las características que nos hacen únicos a cada uno de nosotros: resulta muy natural que nuestra individualidad esté presente en algo tan íntimo como es el latido de nuestro corazón.

Referencias

Caterina Fuster-Barceló, Pedro Peris-Lopez, Carmen Camara. ELEKTRA: ELEKTRokardiomatrix application to biometric identification with convolutional neural networks. Neurocomputing (2022). DOI: https://doi.org/10.1016/j.neucom.2022.07.059

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