¿Por qué todas las estaciones de tren de Suiza tienen el mismo reloj?
La fama relojera de Suiza le precede por todas partes del mundo, y es que puede presumir de fabricar unos relojes de gran calidad admirados en todos los rincones del planeta. Otro atractivo por el que se conoce al país alpino es su completo sistema de trenes, que conecta el territorio de una punta a otra con gran eficiencia.
Si juntamos ambos elementos, pensamos en la puntualidad de este transporte y en el icónico reloj que marca milimétricamente la hora en cada estación. Pero algo muy curioso es que esta pieza de relojería es exactamente igual en todas las estaciones del país.
Puntualidad y sincronización
El emblemático reloj que adorna y marca la hora en toda las estaciones del territorio suizo contribuye a garantizar esa puntualidad que tanto les caracteriza. Esta pieza fue diseñada por Hans Hilfiker en 1944 y «presenta algunas características distintivas como el segundero que se desliza por la esfera en vez de dar saltitos (esto reduce el desgaste del motor)», detallan en el libro ‘Viajar en Tren por Europa’ (GeoPlaneta).
La estructura es sencilla y clara: no tiene números, sino rayas negras en un fondo blanco, y el minutero y el horario también son negros. Por su parte, el segundero es rojo, con la punta en forma de círculo. Ese diseño, replicado en cada estación del país, responde a un único motivo: buscar la máxima puntualidad y sincronización.
Los trenes parten en el preciso instante en el que el minutero cambia de posición, dándose casos en los que «el maquinista ha seguido a rajatabla la hora del reloj pese a ser claramente errónea dando al traste con los horarios», señalan.
Además, aquellos que quieran hacerse con una de estas piezas de relojería tan especiales podrán comprar los de la marca Mondaine, con licencia para reproducirlos como reloj de pared y de pulsera.
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