La letra pequeña de la ayuda al alquiler en Madrid: no es tan fácil como parece
¿Necesita una ayuda para pagar el alquiler un hogar con unos ingresos anuales entre 32.200 y 88.200 euros anuales o, lo que es lo mismo, en el que todos los meses entran entre 1.750 y 4.200 euros?
El plan integral de alquiler que arrancó ayer en el Ayuntamiento de Madrid a través de su Empresa Municipal de Suelo y Vivienda (EMVS) ha generado un gran revuelo. Por un lado, están quienes defienden que la clase media, con los sueldos anteriormente mencionados, no debería recibir subvenciones para vivir de alquiler, pero también hay quienes consideran que la Administración no solo debe centrarse en el alquiler social y aplauden este tipo de iniciativas, pero consideran que la manera de plantear dichas ayudas no es la correcta, por el riesgo de generar economía sumergida y provocar mayores distorsiones en el mercado de las que existen actualmente.
Hay quienes defienden que estas ayudas generarán economía sumergida
El plan, cuya presentación oficial estaba prevista para el pasado lunes a cargo del alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, fue finalmente pospuesto y los detalles del mismo los recoge la EMVS en su página web, que incluye una sencilla herramienta que permite, introduciendo los datos solicitados, comprobar si tendríamos derecho a una ayuda, de qué importe, y qué precio pagaríamos por el alquiler.
Como suele suceder con este tipo de iniciativas, la letra pequeña pone de manifiesto que puede no ser oro todo lo que reluce. Es decir, no todos los hogares, a pesar de cumplir los requisitos económicos, pueden llegar a recibir el denominado ‘bono vivienda’ y, en algunos casos, las ayudas pueden oscilar entre los 75 o los 160 euros.
A grandes rasgos, estas son algunas de las claves del plan municipal:
No hay barra libre de ayudas
La EMVS habla de una ayuda máxima de 900 euros al mes. Es decir, habrá hogares que consigan 75 euros y otros que puedan optar a ayudas de hasta 900 euros, pero, entre medias, hay un amplio abanico de importes. El importe de la ayuda dependerá de los ingresos brutos de la unidad familiar. Es decir, no es lo mismo que la ayuda la solicite una persona que viva sola, que una que viva en pareja y que además tenga a su cargo hijos, sea víctima del terrorismo o de violencia de género, dos aspectos que la empresa municipal tiene especialmente en cuenta a la hora de calcular el importe de la ayuda.
Si utilizamos la calculadora de la EMVS, comprobamos, por ejemplo, que una persona que viva sola y tenga unos ingresos de 2.900 euros brutos mensuales podrá acceder a un alquiler, como máximo, de 810 euros mensuales —el 30% de sus ingresos netos—, pero siempre y cuando tenga más de 35 años, puesto que de lo contrario no cumplirá con las condiciones exigidas para recibir una ayuda. Si es menor de 35 años, recibirá 135 euros.
Madrid ayudará a pagar el alquiler a la clase media, ¿qué requisitos pide?
E. Sanz
¿Es posible conseguir una ayuda máxima de 900 euros al mes? Sí, pero no es sencillo. Es decir, no basta con cumplir determinados requisitos económicos, sino que en el hogar deberán darse una serie de circunstancias, como haber sido víctima del terrorismo o de violencia de género, ser familia numerosa o tener algún miembro de la unidad familiar con discapacidad. O ser menor de 35 años, un requisito que suele ser determinante para recibir ayudas.
De hecho, una pareja con cuatro hijos y unos ingresos brutos mensuales de 5.000 euros recibirá ayudas de 610 euros para un alquiler de 1.400 euros al mes, siempre y cuando uno de los miembros del hogar lleve empadronado, al menos, cinco años y tenga menos de 35 años. De lo contrario, no recibirán ninguna ayuda. Además, si en lugar de familia numerosa esa familia está compuesta por dos padres, dos hijos y dos abuelos, la ayuda se reduce a 460 euros, siempre y cuando quien solicita la ayuda tenga menos de 35 años. Si supera esa edad, de nuevo, no recibiría ningún tipo de ayuda.
Cinco años, al menos, empadronado en Madrid capital
Uno de los requisitos imprescindibles para poder optar a las ayudas es llevar, al menos, cinco años empadronado en Madrid capital. No vale con haber estado empadronado en alguno de los municipios de la Comunidad de Madrid. Si no se cumple este requisito, no hay posibilidad alguna de poder optar a estas ayudas. En el caso de una pareja, basta con que al menos uno de ellos cumpla con este requisito.
Necesita una bolsa de viviendas para alquilar
El éxito del plan de ayuda al alquiler del Ayuntamiento de Madrid depende, fundamentalmente, de la bolsa de viviendas que consiga poner en alquiler. Una bolsa de viviendas que se nutrirá de las viviendas vacías que los particulares quieran ceder a la EMVS. Viviendas procedentes de herencias o del alquiler turístico, duramente castigado por la pandemia.
Es decir, el Ayuntamiento de Madrid necesita de esas viviendas para poder ofrecer a esa clase media pisos en alquiler. Sin oferta, no hay demanda. Y la oferta tendrá que casar con las preferencias o necesidades habitacionales de los futuros inquilinos. Es decir, una pareja puede querer un alquiler en La Latina, pero que la oferta de vivienda la encuentra solamente en Carabanchel o Moncloa o que, aun encontrándose en La Latina, no encaje ni en precio ni por sus características con sus necesidades.
Un tasador independiente establecerá qué alquiler corresponde pagar
El objetivo de la empresa municipal es captar 300 viviendas durante 2021, otras 400 durante 2022 y otras 400 durante 2023. Es decir, aunque previsiblemente la demanda será muy elevada, el gran reto de la EMVS es conseguir que los particulares les cedan, durante al menos cuatro años, el usufructo de viviendas que tienen actualmente vacías.
EMVS y propietario, de acuerdo en el alquiler
Otro aspecto clave del plan de alquiler es quién fija o quién fijará los precios de alquiler de dichas viviendas. La EMVS explica que será una tasadora independiente la encargada de tasar el valor del piso y la que establecerá qué alquiler corresponde según ubicación, estado y número de habitaciones. En este sentido, la empresa municipal ha licitado este servicio con el que prevé que se realicen unas 350 tasaciones durante los próximos 24 meses.
La gran pregunta es, ¿estarán esos precios por encima o por debajo del mercado? Aunque será el tasador quien fije el precio del alquiler, con base en los parámetros antes citados, es un precio que debe aceptar el propietario para ceder su vivienda a la EMVS. Si considera que se aleja del precio del mercado, podría verse desincentivado a cederlo, a pesar de que el ayuntamiento le garantiza el cobro de la renta durante cuatro años. Además, independientemente de la ayuda que conceda la EMVS, el propietario recibirá toda la renta pactada, que en ningún caso podrá ser inferior a 450 euros.
El propietario recibirá toda la renta pactada, que nunca podrá ser inferior a 450 euros
Por lo pronto, la opinión pública manifestaba este martes, casi de manera generaliza, su rechazo a este tipo de ayudas, al considerar que la clase media a la que se dirigen estas ayudas tiene un poder adquisitivo suficiente como para poder costearse un alquiler. Algunos expertos recelan de las ayudas, pero por otros motivos.
«No toda la política en materia de vivienda tiene que ser política social. Obviamente, hay que atender primero a los sectores más desfavorecidos, pero eso no significa que no haya que plantear incentivos para otros segmentos de la población», explica a El Confidencial Antonio Carroza, consejero delegado de Alquiler Seguro, quien, sin embargo, pone en duda la manera de ejecutar estas ayudas.
Madrid quiere reconvertir 15.000 ‘airbnbs’ en pisos municipales ante el desplome turístico
E. Sanz
«Las ayudas directas solo generan economía sumergida y falsean el mercado. Hay que fomentar la colaboración público-privada, pero no creo que sea esta la mejor manera. Suelen ser muy populistas, pero no funcionan, porque las subvenciones llevan a la picaresca y a la economía sumergida y, al final, consiguen el mismo efecto que conseguiría limitar los alquileres», añade este experto, que recuerda experiencias fallidas pasadas, como la Sociedad Pública del Alquiler, que puso en marcha en 2005 el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero junto con la ministra de Vivienda, María Antonia Trujillo.
«Soy partidario de incentivos fiscales al inquilino, pero sobre todo al propietario, porque de esa manera no hay flujo directo de dinero y permite que los alquileres estén fiscalizados».
La polémica está servida y solo el tiempo certificará el acierto o el fracaso de las ayudas, como ya ha sucedido en el pasado. Por lo pronto, medio centenar de propietarios ya han llamado al teléfono de la EMVS.