Estos son los cereales de desayuno más saludables del súper, según la OCU
Los cereales son uno de los alimentos más habituales en los desayunos de adultos y niños, pero no todos los que se venden son saludables. De hecho, según un reciente estudio de la OCU, la gran mayoría contienen un «exceso de azúcar» perjudicial para la salud. La asociación de consumidores ha analizado el etiquetado de más de 300 cereales que se comercializan en supermercados españoles para saber cuáles son las mejores opciones de compra.
Según explican en un comunicado, el estudio sobre 300 cereales ha revisado la composición nutricional, su contenido en grasas, azúcar y sal, así como los aditivos y aromas presentes en ellos, para elaborar así su propia «escala saludable», del 0 al 100, y determinar así los mejores.
Ese total de cereales de distintos tipos ha sido agrupado en seis grandes categorías, donde ha comparado cuáles son los más y menos aptos para llevar una alimentación saludable.
Cereales tipo avena
Dentro de esta categoría, la OCU ha comparado 33 referencias, 8 de ellas de producción ecológica, en su mayoría elaboradas únicamente a partir de este cereal. En términos generales, cuentan con un perfil saludable, tienen un gran aporte en hidratos de carbono (60%), así como proteínas (12%) y fibra (10%). Además, no llevan aromas y han encontrado pocos cereales a base de avena con aditivos.
Entre las marcas mejor valoradas por la OCU destacan los salvados de avena de Auchan (Alcampo) y Hacendado (Mercadona).
Cereales azucarados
En esta categoría la OCU ha incluido aquellos cereales que se caracterizan por ser dulces o porque se les ha añadido azúcar, miel o chocolate. Son productos dirigidos sobre todo a los niños, y poco recomendables, ya que contienen mucho azúcar y un perfil nutricional bajo: un 25% de media en azúcares, apuntan.
El producto que cuenta con mejor valoración de la OCU al no contener aditivos ni aromas es Crunchy espelta con cacao, de la marca Origens.
Cereales rellenos
Esta «novedad» en el mercado de los cereales no es una opción saludable, comenta la OCU en su informe. Al igual que los azucarados, están dirigidos sobre todo al público infantil. Sin embargo, «eso no significa que su composición nutricional sea acorde con las necesidades de los más pequeños», subrayan. En concreto, es un producto demasiado rico en azúcares (27% de media), con un contenido en grasas saturadas que hay que tener en cuenta y muy poca fibra.
Las opciones menos malas en esta categoría serían, según la OCU, las Almohadillas de la marca Eroski y las Almohadillas crujientes de avena con 70% cereales integrales, de la marca Kölln.
Corn flakes
Los tradicionales copos de maíz son, junto a los copos de avena, son los cereales más sencillos y clásicos. Aunque el contenido en azúcares añadidos es solo un 6,4% de media, el mayor problema a tener en cuenta aquí es la sal, ya que «es muy fácil encontrar cereales con más de 1% de sal», indica la OCU.
Los cereales de este tipo más recomendables serían los Delice flake, de la marca Nat, y los Copos de trigo y espelta, de la marca Consum Eco.
Cereales tipo Línea
Esta categoría incluye a aquellos «copos de trigo o arroz integrales» así como a aquellos a los que se les ha añadido fibra (en algunos casos en forma de salvado), frutos rojos o trozos de chocolate. Su «connotación saludable» ha hecho que cada vez sean más frecuentes en los supermercados y muchas personas recurran erróneamente a ellos para adelgazar.
Sin embargo, estos cereales «no son los menos calóricos», advierten desde la OCU, ya que contienen 387 kcal de media por 100 g de producto, superior a los copos de avena (373 kcal de media por 100 g) y los copos de maíz (377 kcal por 100 g). Además, «el ingrediente más cuestionable es el azúcar añadido«, presente en estos cereales en un 15%.
Los mejor valorados por la OCU dentro de esta categoría son el Salvado de trigo integral de Hacendado (Mercadona) y los Sticks de la marca Carrefour Fibra.
Muesli
Al igual que los cereales de la anterior categoría, estos productos se presentan bajo «una connotación saludable», en este caso, por su composición, basada en una mezcla de cereales (avena, arroz inflado, trigo, maíz) a los que se les puede añadir frutos secos (nueces, almendras, avellanas…) y frutas desecadas o deshidratadas (pasas, manzana, plátano, coco, fresas…).
Sin embargo, a pesar de venderse como «la versión saludable de los cereales de desayuno», la realidad es que «no son tan saludables como parecen», sostiene la OCU, que añade que «no es tan sencillo encontrar un muesli con un buen perfil nutricional».
Además de su contenido en grasas saturadas (5% de media) y azúcares (19% de media), muchos contienen aditivos y aromas, y solo la mitad han superado la media del análisis de la OCU, que únicamente ha destacado dos productos de este tipo: el Muesli de avena con frutos secos de la marca Kölln y la Granola con bajo contenido en azúcar de la marca Hacendado (Mercadona).