Estás usando mal tu almohada: así debes emplearla para descansar bien
La persona promedio pasa 26 años en cama, por lo que la postura que adoptemos y los elementos que empleemos son clave para lograr un buen descanso y tener buena salud.
Uno de esos elementos clave es la almohada, y puede ser que no la estés empleando en toda su capacidad. Es lo que concluye el Mirror en un reportaje en el que cita a Rex Isap, CEO de la empresa fabricante de colchones y ropa de cama Happy Beds.
«La desalineación mientras dormimos es un gran problema, que afecta a nuestros cuerpos al ejercer presión sobre la columna vertebral. Usamos almohadas todos los días para descansar la cabeza mientras dormimos, pero deberíamos usarlas más, ya que tienen otros beneficios para nuestro sueño», dice Isap.
«Colocar una almohada entre las piernas o las rodillas puede promover una mejor postura para brindar un sueño nocturno más reparador, apoyando los músculos y la alineación del cuerpo«, dice el experto.
«También alivia la presión en la zona lumbar y las caderas y alivia la tensión muscular, lo que puede ayudar a quienes suelen sufrir dolor al intentar dormir», añade.
Hay más usos: dormir con una almohada detrás de la espalda te brinda una posición más recta para dormir, lo que también ayuda a la digestión y mantiene la columna alineada con el cuello. Para aquellos que luchan contra los ronquidos, también vale la pena intentarlo, ya que dormir de lado puede abrir las vías respiratorias.
Dormir con una almohada entre las piernas también es ideal para las mujeres embarazadas, a quienes les puede resultar difícil ponerse cómodas. Rex Isap dice: «Para las mujeres embarazadas, esta es una excelente manera de sentirse más cómodas durante la noche y permitir un sueño menos inquieto durante este tiempo».