Derrick Lewis, detenido por conducir a más de 200 km/h en una zona de 80 a pocos días de pelear en UFC Sao Paulo
La cadena de televisión estadounidense ABC desvelaba este martes que Derrick Lewis fue arrestado por conducción temeraria el pasado 25 de octubre. El luchador de UFC conducía un Lamborghini rojo, presuntamente a más de 200 kilómetros por hora en una zona limitada a 80. Lewis quedó en libertad el mismo día tras una fianza de 100 dólares y su próxima cita con los tribunales está fijada para finales de diciembre.
Aunque la noticia pudo haber puesto en peligro la cartelera principal de este domingo en Brasil, donde Lewis se enfrentará a Jailton Almeida en el combate estelar de UFC Sao Paulo, el peleador se encontraba ya en Brasil cuando saltó la noticia.
Cuando Lewis ha sido preguntado acerca del suceso por los medios de comunicación en rueda de prensa, la ‘bestia negra’ ha rechazado hacer comentarios al respecto. Lo único que ha declarado es que no cree «que fuera él».
El reto de la ‘bestia negra’
Este sábado frente Jailton Almeida, Lewis se enfrenta a una de las peleas más complicadas de su carrera. El peleador de Nueva Orleans acaba de salir de una racha negativa de tres victorias consecutivas. Lo consiguió tras vencer a Marcos Rogério de Lima en poco más de treinta segundos el pasado mes de agosto. Con este triunfo, Lewis alcanza ya las 22 victorias por nocaut y tiene un récord de 27-11.
La ‘bestia negra’, que es uno de los peleadores más icónicos de la UFC, renovó su contrato con la compañía poco después de vencer a De Lima. Una nueva victoria frente al brasileño podría volver a situarlo en la lucha por el título de la división.
Lewis no lo tendrá fácil, pues se verá las caras con uno de los luchadores más peligrosos del peso pesado. Jaiton Almeida, uno de los máximos aspirantes al título de la división, acumula cinco victorias consecutivas en UFC, donde permanece invicto.