Salud

Casi la mitad de los adultos mayores de 40 años podría tener una enfermedad cardíaca oculta, según un estudio

Cada año, casi 20 millones de personas fallecen a causa de enfermedades cardiovasculares (de todas esa muertes, el 85% se producen concretamente por ictus o infarto de miocardio). Existen varios factores de riesgo modificables que contribuyen al riesgo de este tipo de accidentes cardiovasculares, incluyendo el tabaquismo, la hipertensión arterial, el colesterol alto y la obesidad; así como factores de riesgo no modificables como la historia familiar o ciertas enfermedades como la diabetes.

La causa más común de infarto

Ahora, una nueva investigación publicada en la revista académica Annals of Internal Medicine ha encontrado que hasta la mitad de los adultos de más de 40 años de edad podrían padecer enfermedades cardiovasculares ‘ocultas’, que no provocan síntomas.

El hallazgo parte de un estudio realizado en Dinamarca sobre 9.500 personas mayores de 40 años sin síntomas conocidos previos de enfermedades cardiovascular. A estas personas se les practicó una angiografía por tomografía computarizada, una técnica de imagen, con el fin de encontrar aterosclerosis obstructiva coronaria no diagnosticada previamente.

De hecho, la aterosclerosis coronaria es la causa más habitual de infarto de miocardio, y consiste en una acumulación de placa (depósitos de colesterol) en las arterias que proporcionan sangre al corazón.

La cuestión del riesgo en las personas asintomáticos

Este método arrojó que casi la mitad de estas personas, un 46%, padecía una aterosclerosis no diagnosticada previamente (un 36% padecía enfermedad no obstructiva y un 10% obstructiva).

La gran sorpresa, explican los autores, reside en el 10% que padecía enfermedades obstructivas pero que no mostraba síntomas identificados de dichas enfermedades.

Esto plantea una importante pregunta sobre la significancia de la condición en las personas asintomáticas: hasta ahora, la importancia de la aterosclerosis coronaria provenía principalmente de los pacientes que ya habían sido diagnosticados antes de sufrir un accidente cardiovascular relevante. De la misma manera, ilustra la eficacia de la tomografía computarizada para establecer el riesgo cardiovascular en los pacientes asintomáticos.

Referencias

Andreas Fuchs, Jorgen Tobias Kühl et al. Subclinical Coronary Atherosclerosis and Risk for Myocardial Infarction in a Danish Cohort. Annals of Internal Medicine (2023). DOI: https://doi.org/10.7326/M22-3027

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