Avance clave contra el cáncer de pulmón: identifican una proteína que permitirá crear nuevos fármacos
Una diana para desarrollar nuevos fármacos contra el cáncer de pulmón es la proteína RAF1, pero antes había que conocer su estructura y eso es lo que ha desvelado un equipo de investigadores españoles y daneses, según publica Molecular Cell.
Cada año se producen en España unos 30.000 casos de cáncer de pulmón, de los que entre un 10 y 15 % están causados por mutaciones en oncogenes KRAS, un subgrupo el que aún no hay terapias efectivas.
Los grupos de Mariano Barbacid, en el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), y de Guillermo Montoya, de la Universidad de Copenhague, han conseguido determinar la estructura de la proteína RAF1, una diana terapéutica contra los tumores asociados a oncogenes KRAS.
Este oncogen que fue uno de los primeros descubiertos, es el que con más frecuencia se encuentra mutado en humanos y está implicado en una cuarta parte de los tumores en general, incluidos los tres con mayor mortalidad: el adenocarcinoma de pulmón, el carcinoma colorrectal y el adenocarcinoma ductal de páncreas.
«Un paso clave»
Una de las áreas de investigación más activas frente a este oncogen, es identificar inhibidores de proteínas, como RAF1, que son las encargadas de transmitir las señales oncogénicas de KRAS.
La investigación ahora publicada ha permitido identificar vulnerabilidades estructurales en RAF1, lo que hace posible el diseño de fármacos capaces de destruirla.
El laboratorio de Barbacid ya había demostrado previamente, en modelos de ratón genéticamente modificados, que la eliminación de la proteína RAF1 inducía la regresión de la mayoría de los tumores sin causar toxicidades significativas.
Determinar la estructura tridimensional de RAF1 “es un paso clave”, porque pone al descubierto las partes de la proteína a las que un fármaco podría anclarse químicamente, y promover su destrucción por parte de la maquinaria celular.
“La información que proporciona este estudio abre un abanico de opciones para desarrollar fármacos que consigan degradar RAF1”, destacó Sara García Alonso, del CNIO y una de las investigadoras principales del estudio.
De esta manera, consideró, “se abre ahora una ventana de oportunidad para diseñar degradadores de RAF1 con un importante efecto terapéutico en pacientes con adenocarcinoma de pulmón inducido por oncogenes KRAS”.