Adiós a los interbloques degradados en dos colonias de Carabanchel: se reformarán para "disfrute de los vecinos"

Un plan especial reformará los interbloques de las colonias de Loyola y Virgen de la Inmaculada, en Carabanchel. La Junta de Gobierno ha aprobado este martes el plan especial para reformar los espacios libres entre edificios -que en muchas ocasiones están degradados y sin uso- para instalar nuevas áreas estanciales accesibles para los vecinos. Según ha informado la vicealcaldesa, Inma Sanz, la Empresa Municipal de la Vivienda y Suelo de Madrid (EMVS) ya está ejecutando una primera fase de obras de urbanización en este territorio, de de 97.314 metros cuadrados y, ahora, se aprueba la segunda, enfocada en darle una nueva vida a estos huecos.
Estas nuevas áreas estanciales contarán con un recorrido accesible para vehículos de extinción de incendios, que hasta ahora no podían acceder a la totalidad del área, por lo que se mejorará la «seguridad de las colonias», según ha valorado Sanz. Y, además, estas obras también buscarán «mejorar la habitabilidad, sostenibilidad, accesibilidad, seguridad, eficiencia y cohesión social«, tal y como informan fuentes de la EMVS. La vicealcaldesa ha expuesto la problemática que gira alrededor de los interbloques que, en muchas ocasiones no son de titularidad pública y, por lo tanto, no se puede actuar sobre ellos a no ser que exista un plan especial.
Por tanto, esta estrategia aprobada este martes califica dichos espacios como vía pública por ejemplo, en los accesos a portales, y como área estancial para los espacios peatonales. Mientras que, los de titularidad privada son calificados como espacios libres de uso general siempre que sirvan como vía de paso, acojan servicios municipales o sean total o parcialmente mantenidos con la participación económica o de servicios -como de limpieza- del Ayuntamiento. Según estimaciones del Ayuntamiento, los interbloques suponen más de un tercio de la ciudad residencial de Madrid.
Cambios de uso en parcelas dotacionales
En esta línea, el plan también prevé realizar cambios en parcelas dotacionales para que las calificaciones sean más acordes con su función futura. Por ejemplo, en zonas verdes de suelos que el actual Plan General de Ordenación Urbana de Madrid (PGOUM) califica como equipamiento básico, o en la mejora de la actual pista deportiva que se sitúa en un área calificada por el PGOUM como zona verde básica. Todo esta actuación con el objetivo de “poner en valor la identidad de estos barrios”, según ha continuado la vicealcaldesa.
También se está actuando para replicar esta mejora de los interbloques en más zonas de Madrid. Concretamente, en zonas de 14 distritos de la capital construidas antes de 1985. Las obras ya han comenzado en Moratalaz, en la colonia Urpisa de Villa de Vallecas y en el entorno del colegio Sagunto de Villaverde. Además, las primeras obras del plan para mejorar la accesibilidad, iluminación y conectividad entre plazas se están llevando a cabo en la calle Ibor de Puente de Vallecas, la Colonia Urpisa de Villa de Vallecas, Huerta del Convento (Vicálvaro), Moratalaz, Parcela G Gran San Blas, San Pascual-La Alegría (Ciudad Lineal) y Manoteras Sur (Hortaleza).
Y es que, los interbloques, suponen un antes y después en la vida de barrio de los vecinos, según explican técnicos de Regenera: «En una ciudad que ya está consolidada, los espacios de oportunidad son los interbloques. El futuro de nuestros hijos será de una forma u otra en función de cómo los diseñemos«, aseguran. Para ello, «se rediseñan los espacios donde la gente pueda reunirse y tenga fuentes, alumbrado y pavimentos nuevos, para ponerlos acordes a este siglo», informan técnicos municipales de Regenera” y, así, «crear barrios saludables que contribuyan al reequilibrio territorial de Madrid, fortaleciendo la identidad de barrio», concluyen.