ACR prevé que la falta de mano de obra reduzca a 80.000 los pisos nuevos al año
Ni 120.000 ni 150.000 viviendas al año. El sector promotor en España lleva años aspirando a alcanzar unos niveles de producción de viviendas acordes a la demanda actual. Sin embargo, la escasez de mano de obra que acompaña al sector desde el estallido de la burbuja inmobiliaria seguirá lastrando esa cifra y, en un contexto de demanda al alza, seguirá alimentando la escalada de precios.
Así lo considera Michel Elizalde, consejero delegado de la constructora ACR, que cifra entre 80.000 y 90.000 unidades, la producción anual de vivienda en España durante los próximos años, un mercado que en su opinión tiene demanda para 140.000 unidades, lo que supone un desequilibrio entre oferta y demanda de unas 60.000 viviendas anuales. Un desequilibrio que, inevitablemente, seguirá favoreciendo la escalada de precios, pero que, no obstante, Elizalde considera más sano que la situación de burbuja que se vivió en el pasado con la producción de viviendas completamente disparada.
Una producción de 80.000 viviendas al año para una demanda de 140.000 unidades
Junto a la falta de mano de obra, uno de los grandes problemas a los que se enfrenta el sector promotor -además de la falta de financiación- es el nuevo repunte de los costes de construcción, que en el pasado reciente ha generado importantes problemas al sector ,ya que incluso llegó a llevarse por delante a varias compañías fuertes de la construcción. En la actualidad, y aunque la situación no es tan delicada, sigue sin solventarse el problema de la mano de obra. Un problema que el CEO de ACR no cree que se vaya a solucionar en el corto plazo.
ACR cifra el incremento de los costes de construcción en edificación residencial en un 13,5% interanual hasta septiembre de 2021, frente al descenso del 1,7% que registraban un año atrás, lo que supone que los precios se han disparado más de un 10% en tan solo nueve meses, según refleja el Índice de Costes Directos de Construcción que elabora la compañía. Un incremento que podría traducirse en aumentos del precio en torno al 3%, pero que, tal y como asegura el directivo, hasta ahora, no se está produciendo «porque promotores y constructores se están echando a las espaldas estos incrementos de precios«.
Las subidas registradas en los últimos seis meses se deben, en gran medida, a la escalada de precios de materias primas como el acero, la madera, el aluminio o el cobre, pero aún no se aprecian todavía subidas significativas en el coste de la mano de obra, principal causa del incremento de los costes en los últimos años.
«Destaca el precio del acero, que ha subido un 35% en nueve meses. Esto supone que hacer una estructura hoy cuesta un 28% más que hace un año”, ha destacado el CEO de ACR. Otras subidas significativas son las correspondientes a cimentaciones (+23,5%) o carpintería de madera (+18,3%), seguidas de pintura (+9,5%) o vidriería (+8,9%).
¿Y qué ha pasado con la mano de obra? Según ACR, a pesar de la enorme escasez, los incrementos se contuvieron durante la pandemia, una tendencia bajista que se ha invertido una vez que se ha recuperado el ritmo habitual de los proyectos y despejado incertidumbres, con un mercado residencial muy dinámico.
Una cartera de 300 millones al cierre de julio
ACR sobrevivió a la última crisis financiera y tras año y medio de pandemia las cifras de la compañía invitan al optimismo. La constructora alcanzó un beneficio antes de impuestos (BAI) de 3,3 millones de euros en 2020, un 54% superior al registrado en 2019. Este resultado estuvo acompañado de unas ventas de 243 millones de euros (incremento del 45,7%) y una cartera valorada en 254 millones a 31 de diciembre de 2020.
“Al cierre de julio situamos nuestra cartera en 300 millones, tras contratar 13 proyectos por valor de 148 millones de euros, un tamaño de compañía con el que nos sentimos muy cómodos y que no queremos rebasar porque nos permite centrarnos en nuestra apuesta por la industrialización y en un marco de relación colaborativa”, ha indicado Michel Elizalde. Uno de los proyectos más relevantes es el que desarrolla actualmente en Gran Vía 30, un proyecto de 28 viviendas de lujo para el fondo Thor Equities.
En este contexto, las ventas de se situaban al cierre de julio en 123 millones, en línea con las previsiones de la compañía. “Estamos muy satisfechos porque el contexto de mercado durante el primer semestre ha sido complejo, todavía afectado por la incertidumbre de la pandemia, que ha alargado los procesos de contratación, y con los costes de construcción al alza. Aun así, hemos cumplido nuestros objetivos de contratación y las ventas se han situado en el marco esperado”, ha detallado.
La constructora ACR ha presentado hoy su nueva marca. Un cambio de identidad que reinventa su logo y su línea gráfica y que como ha explicado Michel Elizalde, “nace tras una profunda reflexión a nivel interno” que se concreta en su propósito corporativo.
Una evolución en la que ACR mantiene los rasgos que siempre le han caracterizado. “Diría que hoy somos más ACR que nunca, porque desde nuestra fundación, siempre hemos estado en un constante proceso de transformación, conscientes de que solo así podremos avanzar para ser el mejor aliado de nuestros clientes y de nuestro equipo”, ha señalado el CEO de la compañía.
“Es mucho más que un cambio de imagen, ya que refleja nuestra forma de entender y llevar a cabo la construcción y nuestro compromiso para desarrollar nuestra actividad de una forma cada vez más responsable con las personas y con el planeta, progresando hacia un modelo industrial, apoyados en la innovación, la tecnología y la colaboración, entendida en su versión más radical”.